25 octubre 2015

Sitges 2015

He pasado unos días en el festival de cine de Sitges, y he visto una serie de cosas que paso a comentar como si fuese un crítico o un friki de esos. Tengan en cuenta que mi opinión no va a ser imparcial o desapasionada; si vas al festival eres abducido por una masa de fans y te lo pasas mejor que si vas a un cine mundano o ves estas cosas sólo en casa. Digamos que una película a la que le darías un 5 en circunstancias normales se puede convertir en un 7 si la ves en Sitges.

En primer lugar, "Attack on Titan", peli japonesa basada en la famosa serie de anime. Los fans de estas cosas la habían puesto como algo mediocre, pero nuestra sensación fue positiva. Se trata de dos películas y es posible que los que la critican hayan visto sólo la primera.



Como es habitual en el cine japonés, cuando se hace una película sobre una serie no se limitan a contar la misma historia otra vez. O sea, que hay muchas diferencias. Es como si contratasen guionistas que no han visto la serie y les dan el planteamiento inicial y cuatro hitos que deben cumplir. Me dicen que la serie no ha terminado y que la segunda película se avanza a lo que podría salir en la próxima temporada, pero a saber...

¿De qué va? ¿Puede gustarles a ustedes? Pues verán gigantes atacando a personas de tamaño normal, algo de acción y algún charco de sangre, y cosas así. No sé, vean el tráiler, que no engaña.

No pudimos ver la china "The taking of Tiger Mountain" por problemas de agenda, ni "The Witch" en la inauguración porque no quedaban entradas.

En la primera maratón nocturna apareció el director japonés Yoshihiro Nishimura, al que recordamos de otra visita en la que hizo esto:



Yo estuve ahí, entre el público.

Pero volvamos a 2015, la maratón japonesa consistió en un corto de humor japonés sobre luchadores de sumo, "Sumo Road, el musical". Después vino la primera peli, "Assassination classroom", que trata sobre un pulpo que ha destruido la luna y va a destruir la Tierra... Pero todavía no, primero trabajará como profesor de instituto y enseñará a matar a sus alumnos, y si le matan no destruirá la Tierra. ¿Absurdo? Sí, bastante. Parecía que iba a ser buena, el problema es que está basado en otra serie que no ha terminado, de modo que en la peli sólo nos presentan a los personajes y no ocurre nada interesante pasada la sorpresa del planteamiento inicial.



El director Nishimura apareció para presentar la siguiente y esta vez en lugar de sacar un feto de goma se limitó a decir "Bienvenidos, cabrones" en español. Su peli se titulaba "Ninja war of Torakage" y no era tan loca y tan gore como acostumbra. Pero era lo bastante entretenida.



De todos modos no la recomendaría más allá de sesiones dobles o maratones. La noche se cerró con "Ninja Hunter", moteros ninjas con amnesia en un lugar cerrado... Me fui a dormir al poco de verla empezar. Creo que el trailer tampoco engaña.



Mi equipo me comenta otras películas que vieron y yo no, "The boy", una cosa gafapasta sobre un niño con tendencias psicópatas que gustará a los que quieran ver algo gafapasta. "The Gift", un argumento telefilm pero que le da la vuelta a lo que esperaba el espectador y nos la recomiendan, es sobre un tipo que contacta con otro que le hizo bullying en el colegio.

Sobre una maratón a la que no fui me dicen que fue todo una mierda; "Bite", "The girl in the photographs", "Bloodsucking bastards", y sobre todo la chilena "Sendero". Recomendarlas a gente que os caiga mal.

Una buena que vimos y recomendamos es "Turbo Kid", homenaje canadiense al cine de los 80, con varios guiños a ese tipo de cine de aventuras post-apocalípticas (Mad Max en bicicleta) y la presencia del veterano Michael Ironside como villano.



Esta la recomendamos, no es perfecta ni nada, pero de las más entretenidas. Sobre "El nuevo nuevo testamento", que se ha estrenado comercialmente, me dijeron que no estaba mal pero que la influencia de Amélie había hecho mucho daño. Sobre "Anomalisa", que era otra gafapastada, y no se recomienda para quien se pueda ofender con escenas de sexo protagonizadas por marionetas.

Uno de los Monty Python, Terry Jones, vino a Sitges para recibir un premio y presentar "Absolutely Anything", una peli en la que Simon Pegg tendrá poderes absolutos otorgados por alienígenas. No estaba mal, pero quizás el tráiler desvele demasiados chistes:



La pondremos en el cajón de las pelis simpáticas, fue la última aparición de Robin Williams (dando voz a un perro) y quizás sea la última que haga el director dada su avanzada edad.

Entre las que no vi me comentan "What we become" como que no, y "We are still here" como que sí que se puede ver. La primera es sobre infectados suecos en una urbanización de clase media y la segunda sobre una casa encantada.

Entra las vistas, "Cooties", una de niños zombis con Elijah Wood haciendo de profesor. Mi veredicto es que el tema zombis ya ha saltado el tiburón y que no tiene nada de nuevo o interesante. Esta vez son niños, sí, la primera parte no está mal, sí, la segunda es de las que quieres que se acabe la peli ya.

A continuación una película turca, "Baskin". Ha recibido muchos comentarios a favor y en contra, y del estilo "no me he enterado de nada, hoygan, que alguien me la explique". Yo la defino dentro del universo de Clive Barker, podría ser un escenario del juego de rol Kult. En resumen, es de malos rollos y cosas chungas, unos policías turcos encuentran una puerta al infierno...



Si algún día hacen un remake de Hellraiser espero que lo dirija este Can Evrenol. Pero pasemos de nuevo al cine japonés, que ha estado muy presente en esta edición. El director Sion Sono también nos visitó para llevarse un premio, y nos trajo algunas de sus obras. Las que vimos fueron "Tag" y otra de la que hablaremos más tarde.

"Tag" empieza con colegialas japonesas muriendo, y parece un argumento muy loco, pero luego cuando tratan de explicarlo pierde fuelle.



Una de guerreros maoríes que no he visto, pero me han dicho que estaba bastante bien, es "The deadlands":



Ya queda menos, no se alarmen ustedes.

La maratón titulada "La nit + freak". Comenzó con un corto protagonizado por Roddy Piper, el prota de "Están vivos" de Carpenter. En este corto, "Portal to Hell", Roddy es una especie de bedel de una finca que se enfrentará a unos sectarios que invocan a Cthulhu en el sótano.



Y luego las películas de la maratón, que iban a ser "Deathgasm", "Dyke Hard", y otra del japonés Sion Sono, "The virgin psychics".

La primera trata sobre unos chavales que se montan un grupo de música heavy y uno de ellos encuentra una invocación satánica y la usa para una canción y entonces se lía la cosa. Vale, es un poco de zombis, pero es simpática de ver.



La segunda, "Dyke Hard", trata sobre lesbianas suecas que montan un grupo de música y... No, a ver, no es una peli normal, está muy dirigida hacia un público "queer" y si usted es heterosexual se va a aburrir mucho y va a preferir estar viendo una de travestis de Almodovar, porque ahí por lo menos actuarán mejor. Y si no es heterosexual, a lo mejor también lo prefiere.

El trailer no engaña:



Y para acabar una peli muy heterosexual, en el sentido de las de Pajares y Esteso, con un acertado casting de japonesas que quedan bien en ropa interior. "The virgin psychics", unos rayos cósmicos dan poderes a personas que hayan mantenido su virginidad hasta ese momento, pero se estuvieran masturbando en ese momento. Una peli de Sion Sono, basada en una serie que también dirige Sion Sono.



Y antes de irnos vimos "The final girls", una peli que ustedes ya pueden descargarse de internet, y que trata sobre personas reales que se meten dentro de una película estilo "Viernes 13".



Muy recomendable, en serio. Y ya, ahora sí, esta era la última.

06 octubre 2015

El director impostor

Nos gustan los pillos, los caraduras, los impostores, los "pequeños Nicolases"... Hacen cosas que a la gente normal le gustaría hacer pero no se atreven... Algunos son descubiertos y se ocultan de las miradas acusadoras, pero no deberían hacerlo. Deberían contar su historia de éxito.

Por eso vamos a contar la historia de un héroe, que no debería esconderse ni denunciar este artículo que está escrito desde la admiración.

Año 2002, nuestro también admirado Guillermo del Toro estaba rodando "Blade II" en Praga y tenía a sus órdenes a un tal David Barto. Según la primera versión de esta historia "el Barto" (o Bartolomé) era dibujante de storyboards, pero en la IMDB aparece además como "asistente del director". También dice que participó en "Torrente 2" sin estar acreditado, pero eso igual lo ha escrito él...

El Barto había rodado un par de cortometrajes en España, sin pena ni gloria, pero en vista de que tenía contactos decidió probar suerte en Hollywood. ¿Presentando sus cortos? No, la leyenda dice que presentó trabajos de otros directores como si fueran suyos, seleccionando escenas de los mejores cortos españoles de la década. Por supuesto, se lo tragaron.

Y le encargaron dirigir una película, con Christopher Lambert nada menos, titulada "Absolon". El Barto no quiso llamar la atención en España sobre su gran triunfo de ultramar, no fuera que se descubriese el pastel... Pero al final se descubrió. Corre el rumor de que uno de los directores españoles afectados por su robo de escenas se chivó, y que fue recompensado por la productora con un contrato para tres películas. ¿Quién sería? Bueno, si el rumor fuese cierto... De hecho, ¿Será cierta toda esta historia? Hay tantos testimonios que debe ser cierta...

Pero es un genio, seguro que los directores a los que robó escenas no piensan lo mismo, pero ellos deberían haber tenido la iniciativa de mover sus cortos para meter cabeza en Hollywood.

Bueno, lo que da sentido a este artículo no es esta historia que puede leerse en otros blogs, sino que Barto Bartolomé va a estrenar una película española en 2016. Se titula "Renko" y sale Carlos Bardem. Y nuestro hombre figura como director, productor, escritor, efectos especiales, editor, compositor, y cámara.

Desde aquí le animo a contar su historia en entrevistas para dar promoción a la película.